La SIAMPyP

PRESENTACION Aunque desde hace más de un siglo se conoce que la microbiota de ocupación tiene efectos beneficiosos para el organismo, el interés por el microbioma humano y su relación con la salud ha aumentado notablemente en los últimos años. Las investigaciones del Proyecto Microbioma Humano estadounidense y del proyecto MetaHIT europeo han revolucionado el mundo de la ciencia y nos han confirmado que los humanos somos superorganismos cuyo funcionamiento representa una amalgama de propiedades microbianas y humanas y muchas enfermedades son el fruto de la pérdida de armonía entre nosotros y nuestras bacterias. Es probable que el estudio del microbioma humano revolucione la medicina del siglo XXI y en muchas de las enfermedades en las que hoy desconocemos su causa, podamos hallar que la microbiota pueda jugar un papel importante.

Cada vez se da mayor importancia a la modulación de la microbiota intestinal mediante el empleo de probióticos y prebióticos para tratar diversas enfermedades, principalmente problemas gastrointestinales, como diferentes tipos de diarreas (de la comunidad, asociadas a los antibióticos, del viajero, intolerancia a la lactosa, etc.), trastornos funcionales (cólico del lactante o síndrome del intestino irritable) o procesos inflamatorios (colitis ulcerosa). Además se usan con éxito en diversas patologías de la mujer (vulvovaginitis y mastitis) y se ha valorado su efecto en las alergias como la dermatitis atópica y en la prevención de infecciones (desde el recién nacido prematuro hasta el anciano).

Los numerosos proyectos de investigación que han aparecido en los últimos años dedicados a ampliar el conocimiento de la microbiota autóctona y las investigaciones en animales de experimentación y en humanos abren la puerta a futuras aplicaciones con probióticos, prebióticos, trasplante fecal y microbiotas sintéticas. De hecho, hay estudios que apoyarían su utilización en problemas nutricionales (obesidad, malnutrición), enfermedades neurológicas y alteraciones del comportamiento (autismo, depresión, ansiedad), en la enfermedad periodontal y la eventual prevención en varios tipos de cáncer. Por último, se está avanzando en las repercusiones que la alteración de la microbiota puede tener en la aparición de enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipercolesterolemia, síndrome metabólico, osteoporosis, etc.

Todas estas investigaciones han hecho posible el desarrollo de varias sociedades científicas a ambos lados del Atlántico dedicadas al fomento y difusión del conocimiento científico y la investigación, la aplicación clínica y la divulgación sobre la microbiota y su impacto en la salud. De este modo, han conseguido aunar tanto a investigadores básicos como profesionales sanitarios con la idea de aplicar clínicamente, bajo el rigor de la evidencia científica, dichos estudios con la finalidad de hacer posible un foro de intercambio que permita conocer la investigación actual que se está realizando en el entorno público y el privado, para establecer sinergias sobre el empleo de probióticos y prebióticos.

Con estas premisas y, gracias al contacto en diversas reuniones científicas entre profesionales de distintos países, nació la idea en el VIII Workshop de la Sociedad Española de Probióticos y Prebióticos (SEPyP) celebrado en febrero de 2017 en Santiago de Compostela, de crear una asociación científica donde participaran expertos en el área de la microbiota unidos a través del lenguaje (español y portugués). Por ese motivo, el 8 de febrero de 2019, en el marco del X Workshop de la SEPyP, en Las Palmas de Gran Canarias, se crea el Acta Fundacional de la Sociedad Ibero-Americana de Microbiota, Probióticos y Prebióticos (SIAMPyP) con el propósito de abrir puentes entre profesionales de ambos continentes y que integre tanto a investigadores como clínicos y cuente con la colaboración de la industria.